Hace unos días, Matt Bellamy hablaba acerca del nuevo single de Muse, Supermassive Black Hole, diciendo que mientras grababan el disco en Nueva York, salía a muchos bares y clubes nocturnos a bailar, y eso le había inspirado para el nuevo disco. Comparo la nueva dirección de Muse a lo que hace Franz Ferdinand, diciendo que «a ellos les sale muy bien eso de hacer una canción rock pero que al mismo tiempo la puedas bailar», y que esperaba lograr lo mismo con Supermassive Black Hole.

Al menos no mintió en lo de las inspiraciones. SBH