Hace aproximadamente un mes, los Manic Street Preachers se presentaron en el Teatro Avalon de Los Angeles como parte de su pequeña gira por Estados Unidos y Canadá, la primera en más de diez años por esos rumbos. Tuve la suerte y locura suficiente para poder asistir al concierto y he aquí una breve reseña al respecto.

Para empezar, el lugar donde se presentaron es un antro (o club nocturno para los que no entiendan el termino) que se usa ocasionalmente para conciertos, muy moderno y además enclavado en el corazón de Hollywood, en Vine Street casi esquina con Hollywood Boulevard, a media cuadra del teatro Kodak, por lo que se imaginarán que era un lugar bastante bonito y bien cuidado.  Los encargados de abrir el concierto fueron Nico Vega, trío gringo que debo decir me sorprendieron con su energía y presencia en el escenario, si bien a momentos exagerados y ruidosos, en general estuvieron bien y tuvieron una muy buena respuesta del público que abarrotó el lugar.

Media hora después aparecieron los Manics. James Dean Bradfield, Nicky Wire y Sean Moore tomaron el escenario acompañados de un tecladista y otro guitarrista, que les ayudan a tener un sonido más lleno y fiel a las versiones de estudio, algo relativamente nuevo ya que por mucho tiempo solo usaban un tecladista para sus presentaciones en vivo y eso a veces.  Desde la primera nota de Motorcycle Emptiness, el público se volvió loco.  Muy variada la audiencia por cierto, ya que había desde adolescentes hasta señores que evidentemente eran fans de los Manics desde sus inicios hace casi 20 años.  En general, la audiencia era un poco más tranquila que aquí, pero aun así había mucha emoción.

El grupo se notaba feliz de estar ahí, y tanto James como Nicky estuvieron muy platicadores durante todo el concierto, algo que en los Manics no es muy usual, especialmente con James.  Hablaron del tiempo que habían tardado en cruzar el oceano de nuevo, de como no les gusta Coldplay, entre otras cosas. El setlist fue largo y variado, incluyendo un bonito intermedio acústico en el que James canto Small Black Flowers That Grow In The Sky y This Is Yesterday.

Personalmente, fue una de las mejores experiencias de mi vida, los Manics no decepcionaron en ningún momento y al contrario, fueron aún mejores de lo que esperaba.  Siempre iban a faltar canciones con un repertorio tan largo y variado como el que tienen pero nada realmente indispensable les faltó, y ojalá algún día vengan a México, algo que le pude mencionar a James al finalizar el concierto y a lo que el dijo que ellos van a donde sea, solo que los invite algún promotor.  Les dejo el setlist y otros videos más.

This Joke Sport Severed

You Stole The Sun From My Heart

A Design For Life