Realmente es fantástica la combinación que logró Rae Morris en su segundo disco. Gran parte del mismo tiene melodías diseñadas para la pista de baile y que rayan en el pop más pegajoso, mientras que otras evolucionan lo que había mostrado en su debut, baladas en piano muy reflexivas y llegadoras. Nunca mejor mostrado que en el más reciente single de Rae, Someone Out There, que también da título al disco y cuyo video es un tributo a la gente y a la ciudad de Rae, Blackpoool.
Después tenemos Lower The Tone, mucho más animada que la anterior pero tampoco sin llegar a los niveles de producción pop de los singles anteriores, y muy en el estilo de la Rae que conocimos hace unos años.