Jimi Goodwin
El tramo del Queen’s Head al John Peel Stage no es fácil. Se encuentran de este a oeste del festival, y hay que atravesar la pirámide para llegar. Ya antes en el día habíamos experimentado eso al querer atravesar mientras estaba Lilly Allen y resultó imposible. Vaya que jala gente. Con esa referencia, decidimos buscar una vía alterna y la encontramos, dandole la vuelta a la pirámide por un camino más largo pero menos transitado. Así que corrimos de ver a The Rakes para llegar a tiempo a los Doves. Tan bueno fue el camino que todavía estaba Jamie T en el John Peel Stage. La verdad no lo conozco mucho y lo que conozco no me agrada tanto, pero que manera de emocionarse de los británicos con el. Las dos canciones que ví, fueron coreadas y bailadas con todo como pocas cosas en el festival. Al terminar él, la carpa se empezó a llenar más y más, y por suerte conseguimos lugar hasta mero adelante porque atrás estaba la locura. A las 11 de la noche exactas, los Doves hicieron su aparición en escena para deleite de las casi 20,000 personas esperandolos. Podría escribir varios párrafos acerca de su presentación, pero solo diré que fue sublime. Es la tercera vez que tengo la fortuna de verlos en vivo y sin duda fue la mejor. La gente se conectó desde un principio con ellos y ellos dieron todo en el escenario. Pounding, Black And White Town, Winter Hill, Kingdom of Rust, The Cedar Room, There Goes The Fear, Spaceface. Cada una más impresionante que la anterior. Son un grupazo en vivo que ojala algún día visiten México.
AwayFromHere 